El domingo 11 de marzo del 2001, después de tres horas de
intenso duelo por lograr el derecho de hacerme con un espacio en la Universidad
Nacional Mayor de San Marcos, el regocijo fue intenso cuando ésta importante casa
de estudios indicaba que era uno de los seleccionados, de la carrera de Geografía, a quien cobijaría en sus
aulas por cinco años de intensa vida académica. Esos cinco años se convirtieron
en nueve dados los méritos académicos que me permitieron continuar
con estudios de Maestría y Doctorado.
En diciembre del 2011, una década después, el regocijo y
satisfacción se hizo nuevamente intenso cuando recibí una propuesta de regresar
a las aulas en otra de las más importantes universidades del país y Latinoamérica.
El Departamento de Educación de la Pontificia Universidad Católica del Perú requería
cubrir las cátedras de "Geografía del Perú" y "Espacio Geográfico, Sociedad y Economía". Cursos, profesión, al que había dedicado mi vida de manera intensa en la última década.
Este 2012, regreso nuevamente a la vida académica y a las
aulas universitarias, esta vez como Docente Universitario de la Pontificia
Universidad Católica del Perú. No hay alegría que pueda ocultar ni mayor
compromiso que pueda asumir por este enorme reto que se me propone.
El mayor reto académico inicia y todas mis fuerzas estarán
orientadas a formar personas y profesionales íntegros. La construcción de la Geografía
como ciencia y como institución en el Perú, se verá también fortalecido con este
gran paso.